Desde el viernes Mario ya está oficialmente fuera del sistema escolar,hemos pedido la baja en el colegio y nos la han dado a regañadientes, pues nos han indicado con toda su "buena fe" la conveniencia de que el niño permanezca escolarizado aunque no sea en su centro. Nosotros les hemos dejado creer que Mario empezará el próximo curso en un nuevo colegio con un programa nuevo e innovador, lo que no les hemos dicho es que ese colegio con el programa innovador será su casa, con la atención personalizada de unos educadores expertos en la personalidad de Mario que no son otros que sus padres y su hermana pequeña, y estamos convencidos de que mientras ellos aprenden también a nosotros nos enseñarán un montón de cosas como llevan haciendo desde que nacieron. Por fin empieza un emocionante camino lleno retos y desafíos de aprendizaje para nuestros hijos, respondiendo a sus intereses e inquietudes y no un sistema estándar y gris diseñado para ensalzar la mediocridad y el aprendizaje sumiso. Por fin termina un periodo de frustración para nuestro hijo y de desilusión para nosotros en el que tanto él como nosotros estábamos encorsetados y etiquetados injustamente donde la única forma que conocen para inculcar conocimientos y corregir conductas es la autoridad y el castigo.
Ciertamente escribir esto resulta liberador y propicia un proceso de reilusión.
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